Las complicaciones son a nivel de diferentes órganos del cuerpo, siendo los más afectados el ojo, el riñón, los nervios periféricos, además el aparato cardiovascular (corazón, arterias y venas). Cuando tenemos alteración en los nervios periféricos hay disminución de la sensibilidad sobretodo en los pies y piernas, por lo cual si la diabetes no está bien controlada pueden aparecer úlceras o heridas que el paciente no va percibir, se infecta y se produce la aparición del pie diabético, que si la diabetes sigue descompensada puede llegarse a la amputación.

Los pacientes diabéticos controlados pueden hacer una vida normal con todos los cuidados del caso: Dieta balanceada, rutina de ejercicios diarios, cumplimiento de medicamentos, acudir periódicamente a controles con su médico endocrinólogo.

Las personas más predispuestas de padecer diabetes son las que tienen antecedentes familiares de diabetes, además presentan sobrepeso u obesidad, llevan una vida sedentaria, no tienen una buena alimentación; además que presentan otras comorbilidades como hipertensión, colesterol y triglicéridos altos, etc.

La diabetes tipo 1 es la que se presenta con mayor frecuencia en pacientes jóvenes, en los que no hay reserva de insulina en el páncreas, por lo cual su tratamiento desde el diagnóstico es con insulina. Se debe en la mayoría de los casos a enfermedad inmunológica.

Por otro lado la diabetes tipo 2, que es la más frecuebte, es la que se presenta con mayor frecuencia en pacientes adultos, con antecedentes familiares de diabetes, que además presentan sobrepeso u obesidad, colesterol y triglicéridos altos.

El paciente diabético con estilo de vida saludable, como alimentación balanceada y rutina de ejercicios diarios, además del cumplimiento de sus medicamentos y controles con su médico endocrinólogo, puede llevar una vida tranquila y sin el desarrollo de complicaciones por la enfermedad.

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